UNA VIDA ENFOCADA AL TRABAJO Y AL ÉXITO
La vida debería tener como hábito constante el trabajo y como meta el éxito. El placer y la diversión deberían ser simplemente un complemento de éstos, para reducir por ejemplo el nivel del estrés en un momento dado y retomar luego nuevamente la labor.
Sin embargo, mucha gente tiene como objetivos finales el placer y la diversión, y sus vidas están enfocadas en éstos más que en el trabajo. De hecho, una gran parte de la población considera que el trabajo es un medio para alcanzar sus metas de cubrir sus costos para divertirse y maximizar su placer. Y siendo ésta la mentalidad, dedican más tiempo a la diversión que al trabajo, cuando en realidad debería ser al contrario: se debería dedicar más tiempo al trabajo que a la diversión.
Una vida enfocada en la labor y el éxito, es un camino que cultiva para luego cosechar logros, satisfacción por el deber cumplido y gloria. El trabajo está antes que el placer.
Comentarios
Pero a veces hay trabajos que no merecen el tiempo, y por circunstancias se encuentra ahí atrapado el individuo.
En tal caso, mejor divertirse.